algunos detalles del horror

Un día nos fuimos de camping. Cuando volvimos, la bacha de tu cocina estaba muy tapada, y se llenaba de agua. Habíamos vuelto un domingo, cerca de las 5 de la tarde. Yo quise ponerme a lavar y ordenar mientras vos estabas con tus hijos, y me tomé el trabajo de limpiar el sifón para que la bacha descongestione y esa tarea fuese posible. Ese fue el primer día, que yo recuerde, que mostraste tu peor versión. Ese día me gritaste, me gritaste "NO ES TU CASA!", que era algo que por demás yo sabía. Te enojaste mucho. Después me explicaste, que te enojaste por si yo llegase a hacer mal esa tarea. Me aplicaste la ley del hielo, también, ese día no estuviste dispuesta a comunicarme mejor qué era lo que sucedía. Yo no entendía mucho, la verdad que ya había empezado y decidí terminarlo. Limpié el sifón, destapé la bacha de tu cocina, ordené y limpié los platos. Vos estabas enfurecida, y creo que me fui a mi casa, que no me quedé ahí. Al día siguiente viniste a almorzar, pero seguías muy enojada, nos subimos a tu auto y manejaste desenfrenada, daba mucho miedo ir en tu auto así, manejaste como loca. En el almuerzo me dijiste algo de que bueno, que sería así. Y de que yo no aceptaba que me ayudaras o me dijeras cómo hacer mejor las cosas. Loco, porque nunca me lo dijiste. Reconocí que estuve mal en haber iniciado una maniobra en tu casa sin tu previo consentimiento, pero traté de expresarte que lo hice con amor y con la mejor intención posible. Mis amigos me dijeron que estabas rayada, que deberías estar super mega agradecida de que me haya puesto a realizar una labor tan desagradable. Yo quedé traumada, si mal no recuerdo, después de ese episodio. No sé si a la noche siguiente o después de ese almuerzo me invitaste a tu casa y querías que tuviéramos sexo, y yo, después de haber vivido la ley del hielo, los gritos, el maltrato, el estar en un auto que manejaste a máxima velocidad y que me representaba un peligro... me quedé parada, recuerdo, en un rincón de tu cuarto. Como asustada. "Te vas a quedar ahí parada como una autista?! qué te pasa?!". De nuevo, la enferma era yo, después de toda esa secuela de violencia. También tenías algo con el tema del fuego, no querías que yo lo hiciera, y de antemano decías que lo hacía mal, y que no podía recibir críticas ni ayudas... ahora lo veo, estabas proyectando. Pues soy una persona receptiva y que además está harto acostumbrada a las críticas y a las ayudas... a diferencia de vos. El día previo a mi cumpleaños también hubo una secuencia. Creo que nos habíamos ido de campamento, obviamente, con Lili y con tus amigas. Impensado que algún día compartiésemos con mis amigas, "pero siempre las cosas se hacían como yo quería". En ese momento aún no caminabas, en ese momento, aparentemente, aún te era funcional. Pues apenas volviste a caminar comenzaste con tu fase de denigración, triangulación, maltrato y descarte. Pero el día previo a mi cumple, yo manejé volviendo del camping, y fuiste letalmente crítica con mi manera de agarrar las curvas. Tus hijos dormían atrás, no me pareció el momento apropiado para hacer pruebas ni experimentos. Te dije que algún día podríamos ir solo nosotras dos y practicar lo que me estabas diciendo, que nuestros autos son diferentes, que el de enfrente frenaba, en fin... que no podía, en ese momento, aunque me hubiera gustado, que no podía agarrar las curvas de no se qué manera pretendías que lo hiciera. Y me cansé, además, porque durante más de una hora no hablaste de otra cosa. Podríamos haber disfrutado la música, recordado algo lindo del viaje, pero vos lo único que hiciste fue criticarme, y cuando te dije que estaba cansada y si podías hablar de otra cosa te ofendiste. Y llegaste a tu casa y otra vez, adiviná qué, la ley del hielo. Pero ah! la ley del hielo cocinándome una torta para mí, para mi cumpleaños, con tus hijos. Me hiciste sentir amada, a pesar de todo. Pero yo la había pasado mal. Me fui a mi casa... al mediodía me llamaste... "no vamos a almorzar juntas?". Yo toda dolida por el viaje tortuoso que habíamos tenido de regreso al camping. Fuimos a almorzar donde vos elegiste, donde a vos te gusta, lo que a vos te gusta. Después a la tarde la merienda en tu casa, con tus amigos, por mí cumpleaños. Yo estaba chocha igual, era lo que te había pedido cuando me preguntaste qué quería para mi cumple, y quería pasarlo con ustedes. Y a pesar de todo fue el día más feliz de mi vida, el momento más feliz de mi existencia, compartirlo con los seres que amo. Mi primer y último muy feliz cumpleaños. Nunca había estado tan contenta. Qué tengo que decir? "Gracias?". Gracias. Me lo merezco, merezco ser feliz, merezco compartir mi vida con las personas que amo, elijo y valoro. Cuando te operaste, al menos las 2 primeras cirugías, que estabas conmigo. No así la tercera, que ya estabas con Lili de hace rato, pero las dos primeras... estuve al 100 con vos. Yo también me operé, y tu interés fue nulo, tu acompañamiento, nulo. Reciprocidad? Zero. Te comenté que estaba pensando en congelar óvulos, gran decisión de vida. Todo lo que dijiste fue "ah", y seguiste con la compu. Ni te inmutaste. Ya estabas completamente desconectada de mí y de la relación. Hablemos de esa desconexión. Un día planteaste hacer una fiesta en tu casa. Hacía varios días que no cogíamos y hacía varios días que si nos veíamos, siempre era con tus amigas y evitabas a toda costa un minuto de intimidad. Antes que llegaran los invitados te dije que te notaba un poco desconectada, dijiste "puede ser", y después seguiste evitándome y nunca te hiciste cargo ni quisiste hablar de eso hasta claro, ya sabemos, la grand finale. Llegan tus amigas, comemos, bailamos, obvio que Lili y Pame se quedan hasta el final... habían caído un par de chicas que no eran "tus amigas", que no se quién las habrá invitado, tal vez Daphne, que al menos una, Fernanda, era conocida en el mundo lésbico. Les conté, cuando solo quedaban Lili y Pame, que era conocida por no tener responsabilidad afectiva. Se rieron, Pame hizo un chiste y dijo "como vos! ahora en Tinder van a saber que no tenés responsabilidad afectiva". Un "chiste". Sabiendo que me dejabas. Sabiendo supuestamente que volverías a Tinder pero claro, Pame no tenía por qué saber que ya estabas con Lili. Yo me quedé... atónita. Nuestra relación había terminado y no me lo habías comunicado? Para qué me invitaste a tu fiesta? Ahí ya te había empezado a desconocer... cómo hablabas con la novia de Fer y le pedías que te enseñe a bailar salsa y te de clases de salsa y... no sé, obsesionada con algo que en toda nuestra relación no había visto que te gustara para nada y en lo cual probablemente, bueno ahora con el diario del lunes ya sabemos todo el desenlace, pero que ni te interesaba compartir conmigo. Yo tenía una mini... una mini que en otra época te había calentado mucho. Obvio que nos acostamos sin tener sexo. El 1º de Mayo cumplimos un año, adiviná quién estuvo ahí para brindar con nosotras... Lili! Adivinaste. Un día salimos a bailar, algo de salsa. Fuimos a la casa de Lili, y fuimos las 3 a bailar, y yo te desconocí realmente. Vos bailando con desconocidos y yo pintada, para qué me habrás llevado si ni te interesaba? Después me llega una foto de nosotras 3. Días después me comunicás el fin de la relación y establecés tu vínculo con Lili de manera formal.

Comentarios

Entradas populares de este blog

echar flit

Estrés Postraumático Complejo

Todo lo que le diría, sin guardarme nada